Deportes
CORREN LOS “MUERTOS VIVIENTES” EN APOYO AL ALBERGUE DEL HOSPITAL GENERAL
La “muerte” recorrió las calles del centro histórico y contribuyó para recaudar apoyo para el Albergue del Hospital General al celebrarse en su 8a edición con la carrera recreativa atlética Muero por Correr, donde los triunfadores fueron Martín Moreno y Zahira Pérez en 4k y Raúl Ramírez y Naomi Barrón en 2.5.
La presidenta del Voluntariado, Samantha Smith Guerrero, y el alcalde, Alejandro Navarro Saldaña, dan el banderazo de salida.
Cerca de mil “muertos vivientes” salieron a la calles y asustaron en su transitar al tomar la partida en la Alhóndiga de Granaditas para ir por los 2.5 y 4 kilómetros, varios de ellos ataviados con disfraz en ocasión del festejo a los difuntos.
A la señal del alcalde Alejandro Navarro y la presidenta del Voluntariado del Albergue, Samantha Smith, tomaron la partida y fueron asustando en su trayecto, de 5 de Mayo, Pardo (en sentido contrario) y su ingreso al túnel Tiburcio Álvarez, frente al Cantador, hizo más “terrorífico” el trayecto, entre niños y mayores brindando algarabía corrían, trotaban y caminaban. Durante el recorrido eran animados por los vivos que se paseaban por las calles entrada la noche y devoraban los metros de los dos trayectos.
Los corredores y recreativos de la ruta más corta, la de 2.5 kilómetros, tomaron el regreso en la rampa del Jardín Unión y a toda carrera emprendían el retorno a la Alhóndiga. Los de la ruta de 4K, fueron hasta Embajadoras y tomaron el regreso a la explanada del histórico recinto, donde los esperaba la meta y la aclamación de la gente apostada en ese sitio.
El primero en arribar a la meta fue el joven Raúl Ramírez, ganador de los 2.5 kilómetros, seguido de Ezequiel Lara y Carlos Molina.
En las damas, la niña Naomi Barrón fue la primera, por delante de Miriam Rodríguez y Ximena Ortega.
En los 4.5 kilómetros el triunfador fue Martín Moreno Meza, seguido de Uriel Castillo y Juan Manuel Juárez. En la femenil, Zahira Pérez fue la triunfadora y luego entraron Jessica Rodríguez y Adriana Gómez.
Así se retrataban en la meta, los más aptos en busca de los mejores tiempos y los premios consistentes en “monederos electrónicos”, además fueron premiados las personas que se mostraban mejor ataviadas con motivos a la muerte.
